Manzana

Conocida en nuestra cultura por ser símbolo de la tentación y por sus cualidades estéticas que la hacen una fruta hermosa, de intenso colorido y aroma inspirador. En la tradición judío cristina es icono del juego de seducción, siendo ampliamente divulgada como objeto de deseos y anhelos. Es muy típica de los países del hemisferio norte, aunque hay muchas variedades insólitamente exquisitas que se cultivan en los países australes, tales como: Chile, Argentina, Nueva Zelanda o Sudáfrica. 

El árbol de manzana o manzano, necesita un clima templado y húmedo, cuyas temperaturas que no desciendan de los 20ºC; razón por la cual es imposible que crezca en el trópico. Según cifras publicadas por la FAO, cada año se producen en el mundo más de 40 millones de toneladas de manzanas, lo que las sitúa en el cuarto lugar en la producción mundial de frutas, tras la uva, la naranja y el plátano.

Existe una amplia variedad de manzanas en el mundo, debido a los cruces genéticos que se hacen todo el tiempo, con el fin de obtener variedades cada vez más atractivas, sin embargo, las más populares son:

• Manzana amarilla o golden: jugosa y muy dulce, es la más apreciada en repostería.

• Manzana reineta: de sabor ácido, es ideal para cocinar platos salados.

• Manzana bicolor: la fuji es una de sus variedades más populares, es una variedad crujiente y perfecta para consumir en crudo.

• Manzana roja: se caracteriza por su base picuda y su intenso color rojizo; queda muy bien en ensaladas.

En cuanto a las propiedades de la manzana, puede comenzar por decirse que cada manzana, es por sí misma, un cóctel extraordinario de vitaminas y de otros elementos fundamentales para una buena salud. La manzana es rica en pectina, un tipo de fibra soluble que no se absorbe en el intestino, ya que retiene el agua y se convierte en un gel que actúa como una emulsión, absorbiendo desechos en el intestino y facilitando la eliminación de toxinas.

 La manzana es una de las frutas con un mayor contenido en taninos, que son astringentes y antiinflamatorios. Esta bella fruta es muy rica en flavonoides, los cuales impiden la oxidación del colesterol “malo”; evitando que se deposite en las paredes las arterias. Es sumamente abundante en vitamina C, lo cual ayuda a nuestro sistema inmune, también posee boro, mineral que interviene en numerosas funciones del organismo. También aporta vitamina E, potasio y fósforo.

Un detallado estudio realizado en la universidad inglesa de Cornell, concluyó que existe una relación entre el consumo de manzanas y un riesgo menor de sufrir enfermedades circulatorias y del corazón, cáncer de pulmón, asma y diabetes.

A todas estas sustancias se deben las propiedades que tradicionalmente se han atribuido a esta sencilla pero prodigiosa fruta.